Mejor sustantivo no se me ocurre para denominar el hecho de que se esta jugando con la vida humana por puro apetito electoral.
Y lo peor y más decepcionante de todo esto es comprobar que si nuestro pueblo es vruto es porque así lo hacen quienes brindando información ostentan el poder de formar la opinión pública al representar como mejor les parece (con sesgo) el debate y discusión sobre temas cruciales ("Dogma vs. Libre Opción"), pero dejando sus conclusiones al aire para que el viento las dirija en cierta dirección ("2 millones no la pueden comprar").
El tema de la píldora siguiente se está abordando politica y mediáticamente sobre falsos presupuestos que en el mejor de los casos son tratado con el "beneficio" de la duda con el recurso del "entrecomillado".
Faltan elementos de juicio, falta que aclaremos ciertos lugares comunes: ¿Cuando comienza la vida humana? ¿Cuál debería ser nuestra responsabilidad respecto a la vida de otros, sobre todo de los recien nacidos? ¿Qué queremos lograr con la planificación familiar? ¿Son pertinentes o necesarias las políticas de control demográfico? ¿A menor población, menor pobreza (Tesis Malthusiana)? ¿A menor tasa de natalidad, más respeto hacia la mujer (Tesis feminista)? ¿Disponer de la vida de otro ser es "Libre Opción" (Tesis progresista)?
Lo paradójico del asunto es que los mismos que reclaman soberanía e independencia de los imperios y poderes extranjeros, luchen por cumplir al pie de la letra la agenda dictada desde afuera por estas "fuerzas opresoras". Nadie de estos soberanos independientes se atreve a cuestionar los dogmas de la ONU y de los grupos y clubes de potencias que vienen a través de la OMS y las oenegés financiadas desde el exterior. ¿Se trata acaso de no morder la mano que te da de comer? Ah! Eso si, cuando habla la Iglesia todo el mundo se rasga las vestiduras alegando que está violando nuestra libertad y derecho.
El hecho que personajes nefastos como el Cardenal Cipriani, Rafael Rey y la Martucha (la engreída de este blog) defiendan el derecho a la vida del no nacido, no convierte a esta causa en una perversidad más de estos personajes. Lamentablemente nuestro periodismo es el mejor ejemplo de esta incapacidad de separar las personas (sus ideas) de sus actos, para poder juzgarlas por los últimos. No hay justicia cuando se le persigue a la persona por ella misma y no por sus cometidos. Reclamamos justicia exigiendo que Fujimori pague por sus delitos de corrupción, no porque es ingeniero o porque fue evangélico ni porque fue una persona inescrupulosa.
La doble moral no es algo que adolecen los corruptos sino todo aquel que, sin conocer suficientemente sobre una persona o un tema, la juzga por la imagen que proyecta. No deberían haber dudas sobre donde comienza la vida para defenderla como se debe. Evadir tan importante detalle es avalar el genocidio más grande de nuestros tiempos.
Sobre los comprobados efectos abortivos de la píldora de marras, pueden chequear este post en mi blog
ACTUALIZACIÓN: Como era de esperarse, una vez más este debate queda en la nada porque otra noticia acaparará la atención. Que linda les resultó la maniobra, Alan.
Por Guille da Maus
Tags: Aborto, Píldora, Alan García.
Como bien lo dices: "Faltan elementos de juicio, falta que aclaremos ciertos lugares comunes: ¿Cuando comienza la vida humana? ¿Cuál debería ser nuestra responsabilidad respecto a la vida de otros, sobre todo de los recien nacidos? ¿Qué queremos lograr con la planificación familiar? ¿Son pertinentes o necesarias las políticas de control demográfico? ¿A menor población, menor pobreza (Tesis Malthusiana)? ¿A menor tasa de natalidad, más respeto hacia la mujer (Tesis feminista)? ¿Disponer de la vida de otro ser es "Libre Opción" (Tesis progresista)?" , es decir, faltan consensos (más que buscar verdades donde no las hay o resultan ontológicamente imposibles de encontrarlas).
ResponderBorrarAlgún dialogado consenso sería una buena respuesta. Pero no estamos de acuerdo ni siquiera en las reglas que debemos usar para propiciar un consenso. Nuestra falta de entendimiento entre humanos es nuestra característica más que un defecto, que debe haberse manifestado por primera vez (estoy convencido) cuando un Homo Sapiens se cruzó con un Neandhertal. Este sapiens luego sobrevivió y como ya tenía capacidad de pensamiento simbólico, inventó el supremo arte de la filosofía y complicó así más las cosas. Nacieron las tesis y las antítesis, lo que finalmente nos redujo hoy a tener una opinión, mejor o peor lograda y/o sustentada. Por eso, sigo oponiéndome donde surgen Opiniones que corren el peligro de aparecer como inamovibles Afirmaciones. Sin perjuicio de darte la razón en que Alan lo propició manipulatoriamente, sigo apoyando a la píldora, como ya lo hice en mi blog.
No, no hay "imposibilidad" de llegar a la verdad, sino un camino tortuoso. La mayoria de las tesis que mencioné se apoyan sobre supuestos de indole económica, como las tesis -racistas y eugenésicas- del reverendo Malthus, las cuales han sido ampliamente (Von Misses, Hayek).
ResponderBorrarY justo das en el clavo con la cuestion de las "opiniones": Reducir las realidades, la verdad, al nivel de "opiniones" es despojarles de todo sentido y significación, y ese es el juego "progresista" para evitar reconocer algunas verdades. En el fondo tratan de creer que la verdad no existe, pero obviamente el intento es vano puesto que por algo estan "protestando", "afirmando", "sosteniendo", etc. no? Sin un minimo de "referentes" comunes (universales), es imposible entendimiento -y comunicación- alguna.