PRODUCCIÓN NACIONAL

No lo dejaron descansar en paz. Tenían que desenterrarlo para hacerlo caminar cual muerto viviente: Fuego Cruzado



No ví más que la primera media hora pues el pésimo tratamiento otorgado al tema no ameritaba perder mi valioso tiempo frente a la tele. Una cosa es tocar un tema escandaloso y otra muy distinta es tratar de hacer escándalo con uno que no lo es de por sí. Los conductores Mariela Patriau y Álamo Pérez Luna parecían que no hubieran ensayado lo suficiente sus respectivos guiones. Su "consternación" por la "gravedad" del tema (la "superbacteria") no fue compartida ni por los alegres sodomitas a quienes la Patriau fue entrevistar en los yunaites. De los panelistas ni se hable. Personajes como Otiniano simplemente rebajan la seriedad del tema hasta la nulidad. Uno se preguntaba qué diablos hacía alli los honorables doctores de la UPCH y del Colegio Médico. A pesar que ellos insistían en que la deplorable higiene de los hospitales públicos era caldo de cultivo para otras infecciones tan o más peligrosas, cayeron en el circo de la dispersión de responsabilidades por el afan "democrático" de ser indulgentes con los gays y homosexuales, el principal "grupo de riesgo".

La producción en general dejaba mucho que desear aún dentro de los códigos corrientes de un formato tan venido a menos como el "Talk Show". Hasta "Astros de la Risa" se ve mucho mejor, más logrado estéticamente. Aparte del lamentable panel de invitados, los cortes (se trataba de un programa grabado) no solamente fueron notorios, sino impertinentes (justo cuando los panelistas o entrevistados estaban por decir algo importante... o incómodo). Más que fuego, lo único que se cruzaron fueron los sudores producto del calor de las luces del set y de una discusión tan anodina como ridícula.

Por Guille da Maus

Tags: Fuego Cruzado, Mariela Patriau, Álamo Pérez Luna, ATV, SARM, Superbacteria.