(El Comercio)
¿En serio retrocedemos por salirnos del coro? La mismísima vox populi vox Dei citada en el artículo da a entender que los partidos políticos lejos de representar los distintos pareceres de la ciudadanía, se han convertido en lastre. No hace falta ser genios analistas para darse cuenta el porqué de esta lamentable situación: la adicción a la mamadera que padecen nuestros politicastros.
Esto es lo que pasa cuando se subsidia una actividad no productiva (en todo sentido): se crea adictos y dependientes que pierden el interés en construir una verdadera propuesta representativa que atraiga a los electores animándoles a contribuir no solamente con su voto, sino con su participación dentro del partido, lo cual obviamente incluye el apoyo económico.
El financiamiento del estado a los partidos como todo intervencionismo distorsiona la relación de estos con su público. Si queremos partidos de verdad, que bajen a la cancha a ganarse el voto como se debe.
Con este cargamontón inauguro la sección PERLAS DE SABIDURÍA destinada a "resaltar" las memeces de nuestros políticos y bienpensantes que todo mundo aplaude. Provecho!
Por Guille da Maus
Tags: Perlas de Sabiduría, Ley de Partidos.
Está mal que el Estado peruano financie a los partidos políticos. Para ser coherentes, hay que pedir que el Estado peruano deje de financiar a la Iglesia católica que, con el respeto que se merece, es una denominación religiosa más entre muchas otras que hay en el Perú. El estatismo es una plaga y hay que combatirlo de raíz. En eso estamos de acuerdo. ¿Publicarás este comentario o lo censurarás como has hecho con otros comentarios míos?
ResponderBorrarYo también estoy de acuerdo en que la Iglesia no debe recibir los subsidios de parte del estado, lo que no quita el reconocimiento por parte del Estado ni la colaboración(articulo 50ª de la constitución).
ResponderBorrarY sobre lo otro, los deslices personales los pongo en el congelador... forever!