El brusco giro dado por el proceso de extradición del ex presidente Alberto Fujimori viene a reactualizar algunos mitos y realidades que se mueven a su alrededor.Toda la carrera del fujitivo ha estado plagada de mentiras y falsedades. Si hay un mito que "rescatar" en su figura es el del vivazo criollo (la conch...) más grande de la historia, cuya fama traspasa fronteras. Los japoneses estan cogidos. ¿Lo serán también los chilenos?
Uno de los mitos abona la supuesta inteligente estrategia de Fujimori de haber elegido Chile (país al que llegó desde Japón burlando controles de la Interpol) para disolver allí cualquier pedido de extradición o, en cualquier caso, que esta fuese aprobada con el mínimo número y peso de delitos a ser juzgados en el Perú. Su objetivo de irse en coche se basaba en el hecho cierto de que ningún Estado puede sacarle así nomás un fallo de extradición a la justicia chilena. Cosa que, de paso, es cierta.
Sin embargo no estamos ante cualquier proceso de extradición ni ante cualquier sustento de delitos, como es el caso de los cuadernillos que contienen las acusaciones a Fujimori. De ahí que la recomendación fiscal y el preventivo arresto domiciliario dictados en las últimas horas podrían ser el preámbulo de una realidad judicial muy distinta a la que pintaba el mito hasta hoy. La balanza habría empezado a inclinarse hacia la extradición e incluyendo la presunción de delitos de orden criminal que la defensa del ex mandatario daba por excluida, de acuerdo con la versión de que este no tuvo nunca participación directa y precisa en los mismos.
El otro mito tiene que ver con el fujimorismo con Fujimori (a través de Santiago y Keiko), hoy representado en el Congreso, y con el fujimorismo sin Fujimori que ha corrido como un río y durante mucho tiempo bajo los puentes de la política.
En efecto, el fujimorismo, como alternativa política, ha pretendido encarnar con éxito, en un país desestructurado como el nuestro, el valor de la mano dura y firme en el manejo de las riendas del Gobierno y del Estado y el compromiso de un asistencialismo social populista como sostén político clave del régimen.
Ha quedado demostrado ahora que el valor de la mano dura y firme, que parecía ser patrimonio única y exclusivamente de un gobierno autoritario como el de Fujimori, puede funcionar perfectamente en un sistema democrático. El desalojo de los invasores de Santa Anita, con la ley en la mano y el orden bien administrado por la policía, es una reivindicación del principio de autoridad que las democracias no deben ni pueden perder.
Así como se desinfla el mito de que las democracias son débiles se desinfla también gradualmente el mito de que solo el fujimorismo puede salvar el país.
Por Guille da Maus
Tags: Fujimori extradición
Lo de vivazo, vale, pero no creo que sea el conchan mas grande de la historia, los hay perores, sin mas solo hay que dar una mirada quien esta sentado en el palacio de gobierno.
ResponderBorrarCreo que el hecho de la avercion al chino es debido a que mostro la verdadera cara de la politica peruana, y hasta cierto punto de nuestra sociedad.
Paredes Castro parece tener razón, al sustentar que la poblacion peruana (en general creo yo) tiene la idea de una figura autoritaria como medio de "salvacion", en parte es una de las razones del porque O. Humala tuvo la votación que tuvo.
De todo esto, creo que es posible ver dos falencias nuestra gente:
1.-Lagunas mentales en masa.
2.-El hecho de no tener la mas minima idea de lo que significa democracia.
Lo primero es cosa sabida; lo segundo, creo yo, que mucha gente me tildara de loco, pero basta dar una mirada a la historia de los ultimos 60 años y con detenimiento la de los ultimos 27 años.
De poco tiempo aca leo este blog que lo encontre por casuela, en lineas generales, debo decir, que concuerdo con el roedor en 50% (hay veces en que, francamente, tengo una posición diametralmente opuesta), su apreciación de la figura del vivazo criollo es una concordancia que tenemos, como lei alguna vez en los primeros año de universidad...El peruano tiene:
Viveza 20
Sabiduria 0
-Huaco-
El Chato Hitlerman decía de Juan Paredes Castro "habla lento para parecer inteligente" y se nota, hay que ser bien ... (mejor no lo digo) para comparar comerciantes invasores con hijos en brazos con fanáticos terroristas dispuestos a volarse junto a sus captores.
ResponderBorrarJuancito, házme un favor: termina tu leche y acuéstate temprano.
Apenas se enfrenten a la realidad de los hechos, no los dictados por la maquinaria mediática demonizadora, sino por la sentencia de un tribunal independiente, van sonando más destempladas las acusaciones contra quien legó un país en marcha, pacificado interna- y externamente (tratado de paz con Ecuador). Ahora que el valor de las pruebas están siendo evaluados por profesionales del derecho, quedarán muy mal parados los argumentos de la persecución.
ResponderBorrarHay que recuperar la memoria de cómo estaba el país en 1990, luego de la hecatombe de García y cómo lo dejó en el 2000: no hay término de comparación, es infinitamente mejor (reconocido regañadientes por Jaime Bayli). Si el Peru goza hoy de una bonanza económica, es por haber cambiado el modelo de pensamiento y acción de los políticos que siempre han gobernado el Perú por la modernidad: la economía de mercado y la solución a los problemas concretos de la gente - todo ello medible. Quienes denostan de la era Fujimori, lo hacen con argumentos emocionales, no racionales. La prueba es que usan el adjetivo (prófugo, nipón, genocida, ladrón, rata,...). Ese es la democracia pervertida en demagogia. apelen al orgullo de ser peruanos, a la dignidad, a la decencia y tantas virtudes; todas ellas imposibles de medir. Quien juzga los hechos concretos buscará cifras: número de escuelas construídas, Km de carreteras, nivel de alfabetización, nivel de salud, TBC, ingreso per-cápita, niveles de inversión, número de víctimas de la violencia política (DDHH), niveles de desnutrición, etc.
Desafío a los demagogos a medir la "dignidad" u otras virtudes amamantadas por la "civilidad" caviar.
Es pura acusación sin sustento decir que fue el "gobierno más corrupto de la historia" el de Fujimori. Es todo lo contrario. La corrupción ha sido medida por Transperency International y contradice a los demagogos del coro persecutorio: la percepción de corrupción aumentó durante el toledato (compruébenlo an la web de TI).
Que Fujimori fue un gobierno violador de DDH?
Las cifras dicen todo lo contrario, según la misma CVR, disminuyó dramáticamente los casos de violaciones a los DDHH.
Pregunto: podemos medir objetivamente la demagogia de quienes acusan sin sustento? Sí, esperemos el veredicto de los tribunales chilenos.
PD: Si los inteligentes (no Vrutos) administradores de Pueblo Vruto son valientes intelectualmente, publicarán estas líneas y las tratarán de rebatirlas con argumentos concretos (medibles) y no con demagogia.
Si de inteligencia se trata, tampoco entrariamos en "cuestones de cifras" pues asi sea 1 solo crimen el cometido, tiene que responder por el. Los aciertos no tienen porque "disculpar" las enormes faltas en su haber como su apetito reeleccionista, la corrupci'on en los programas sociales y los atentados contra las libertades individuales. No se trata de emociones, sino de la realidad concreta que cualquiera con el minimo de atencio pudo constatar durante el decenio fujimorista. La cultura combi, de la fanfarroneria criolla y la prensa chicha es el la muestra mas palpable de toda una decada de precariedad moral que nadie debe olvidar, por mas candidamente encantado que esté.
ResponderBorrar"asi sea 1 solo crimen el cometido, tiene que responder por el" Aquí, en tan solo una línea, hay tres errores de raciocinio: 1) La descontextualización de los hechos, pues el Perú vivía en un conflicto heredado de gobiernos anteriores. 2) El sobredimensionamiento y con ello la distorsión de los hechos: Un crimen, por más execrable que sea, no es lo mismo que 25 mil. Compárece las cifras con la apabullante cantidad de muertes producidas en los gobiernos que precedieron al de Fujimori. 3) La imputación de verdaderos delitos sin pruebas que lo sustenten: Es justamente lo que los tribunales chilenos están evaluendo. El hecho que se haya cometido un crimen, no significa que se pueda culpar al presidente por el sólo hecho de haber sido presidente. Con tal razonamiento politizado, podríamos culpar a un director de empresa de un crimen pasional o de cualquier delito de algún subalterno. Bastaría con esgrimir que la llamada "cadena de mando" nos hace suponer que "es imposible que el jefe no supiera, o era un tonto que no sabía "nada".... Este razonamiento que no es más que una falacia argumentativa, se ha repetido ad infinitum, a periodistas bien dotados intelectualmente como Augusto Alvarez Rodrich y otros. En la inquisición se usaba esta falacia para eliminar a cualquier acusado, sí o sí.
ResponderBorrarEl "apetito reeleccionista" no es otra cosa que la escencia de la democracia. Es el pueblo quien con sus votos determina quién debe gobernar, no los contendores - malos perdedores - que piensan que el poder es una cuestión de turno: "ahora me toca a mí". Tal argumento es profundamente antidemocrático, pues es el pueblo quien evalúa al gobernante y no los políticos perdedores que han demostrado ineficiencia.
"la corrupción en los programas sociales" es una generalidad argumentativa que no tiene asidero concreto. El Peru fue premiado por las NNUU por la eficiencia en los programas de salud y nutrición. Las acusaciones de corrupción son la materia prima de las cuales se sirve la demagogia. Siempre se puede inflamar las emociones con frases como: se levantó al Perú entero, robó y robó, se llevó lingotes, maletas cargadas de dólares, etc. La ausencia de acusaciones en tal sentido en los cuadernillos de extradición prueban que tales acusaciones no tienen un mínimo de asidero.
"La cultura combi, de la fanfarroneria criolla" es un calificativo a un fenómeno sociológico, producto de la emigración del campo a la ciudad. Eso no convierte en delito, el hecho que no esté acorde con nuestro "buen gusto". Cuando la fusión de culturas se manifiesta, hay un rechazo por parte de los habitantes urbanos hacia los nuevos inmigrantes. Si a ello se le llama "decadencia moral", es una reacción ante lo nuevo, es parte del proceso de fusión cultural que estamos viviendo entre el Perú profundo y postergado pero emergente y el urbano y tradicional. Sino, haga memoria cuando el huayno era de "mal gusto" y considerado de baja estofa. Luego buscó aceptación fuera, en Europa y EEUU y luego por los citadinos peruanos, tradicionalmente criollos de pura cepa.
Ojo, que no me referia a las violaciones de DDHH solamente. Esta mas que comprobado el uso de los programas sociales con fines proselititas, la corrupción del poder judicial y ciertos medios comprados (caso de la prensa chicha) a favor de los agentes del regimen (comenzando con Montesinos) y el descalabro moral de un congreso fujimorizado cuya cumbre fue la famosa "ley de interpretacion autentica". No nos olvidemos que Fujimori mismo no queria parecer un desinformado ni un titere sino que afirmaba constantemente quien mandaba aqui: "he ordenado...", "he dispuesto...", y el elocuente "pongo las manos al fuego por él (Montesinos).
ResponderBorrarUse su memoria, no caiga en el mediocre recurso de aferrarse a lo que decidio un juez extranjero que consideró las pruebas presentadas insuficientes, mas no falsas.